Metraje a partir de: 2:18,44
A Paco Ruiz el alcalde, José Antonio Santos Perea minuto de metraje de la retransmisión del pleno por RTVT 2:18,44:
(José Antonio Santos Perea) -Ah ya usted está cansado y la señora Trujillo si no hace una pregunta… por favor, parece que no estaba en el pleno.
(Lucía Trujillo) – Usted ha dicho antes que me iba a quedar con las ganas de hacer preguntas en el pleno.
(Alcalde) -No, no. Le he dicho que estaba usted ardiendo en el pleno. Que está usted hoy…. ¿Eh?
(Lucía Trujillo) -No. No es para tanto.
(Alcalde) -Me gusta cuando hace las preguntas. Además, se pone más guapa cuando hace las preguntas.
(Lucía Trujillo) -¿Sí no?
(Paco Ruiz) -Por favor omita usted comentarios en ese sentido. Se lo pido por favor y deje que nuestra portavoz pueda hacer la pregunta.
(fin de metraje 2:19.16)
Durante la última sesión plenaria en Tarifa, el alcalde, José Antonio Santos Perea, fue triste y desafortunado protagonista de la sesión plenaria y no por abordar cuestiones inherentes a la gestión pública y es que el primer edil, en un aparente intento de ser gracioso realizó un comentario de marcado corte sexista y machista al decirle a la portavoz socialista, Lucía Trujillo, «Me gusta cuando hace las preguntas. Además, se pone más guapa cuando hace las preguntas».
El incidente quedó registrado en un metraje de la retransmisión del pleno por RTVT, con una duración de apenas medio minuto.
Resulta insultante, anacrónico y machista la forma del alcalde al dirigirse a la portavoz de la oposición porque es una mujer. Porque cuando ha sido hacia un hombre no le he escuchado decirle lo guapo que estaba. Ni ninguna otra observación que tenga que ver ni con su aspecto o atractivo físico. Pero ni em broma.
Lo de ayer, era realmente no para interpelarle y reprocharle tan impropio comentario de la máxima autoridad municipal hacia una mujer, sino para decirle que esas actitudes machistas deben quedar fuera de todo debate político. De cualquier debate. Y aún más cuando se trata de un debate en el que los responsables políticos son los protagonistas y se les presupone tienen que dar ejemplo entre la ciudadanía de un mínimo de buena educación.
El incidente es una muestra más que “los Rubiales” existen a pesar de la que se montó con la conducta impropia del alto cargo de la Federación Española de Fútbol que le costó el puesto y por el que está inmerso en una causa judicial por presunto abuso sexual el Sr. Rubiales. No es el caso, pero se intenta banalizar estos comentarios machistas y se le quieren restar importancia cuando realmente la tienen.
Estoy convencido que el alcalde no pretendía demostrar ninguna intención machista y peyorativa hacia la concejala sino que pretendía ser una gracieta. En incluso me consta que vía telefónica pidió perdón a la edil. Pero es que eso si cabe es aún peor. Porque demuestra que seguimos sin darle la verdadera importancia a la necesidad de emplear un lenguaje correcto y carente de cualquier atisbo machista como le dio ayer el señor alcalde. Hay que reparar en este hecho porque es crucial que los líderes políticos sean conscientes de la influencia que sus palabras tienen en la percepción pública y trabajen para fomentar un ambiente de respeto y equidad de género.
La actitud de la edil socialista, como cualquier edil sea de la formación política que sea debe de ser válida por lo que dice y por lo que haga, y no por lo guapa que le pueda resultar al primer edil tarifeño, que no estuvo para nada acertado.
Es necesario subrayar la importancia de mantener un lenguaje respetuoso y libre de connotaciones sexistas en el debate político, porque este episodio refleja la persistencia de actitudes machistas en la sociedad, incluso en figuras de autoridad, y destaca la necesidad de un cambio cultural que promueva la igualdad de género en todos los ámbitos. Ya que de lo contrario, este tipo de actitudes contribuirán muy negativamente a perpetuar estereotipos de género y en una situación político-social como la que vivimos en estos momentos se hace necesario erradicar el machismo en el ámbito político.