La Campera ya está en la ciudad

El aguacero de la mañana dejó paso a una esplendorosa y soleada tarde que junto al paso por La Colá contribuyó a hacer de la Cabalgata todo un espectáculo visual que justifica su declaración como de Interés Turístico de Andalucía

 

La Cabalgata Agrícola de ayer fue la más campera de los últimos años, por la obligatoriedad de la DGT de realizar el cortejo por ‘La colá’. División de opiniones

La venida ayer domingo de la Patrona, María Santísima de la Luz, hasta su localidad desde su ermita en la dehesa de Las Caheruelas, fue sin duda alguna la más ‘campera’ que se recuerda en los últimos decenios. Todo porque la negativa de la Dirección General de Tráfico, que el cortejo discurriera por la N-340 y lo hiciera por La Colá, unida a que el aguacero de la mañana se convirtiera en una tarde espectacular, propició una gran Gabalgata.

La Patrona llegó a Tarifa acompañada de miles de fieles durante todo el camino desde el Santuario y un total de 236 cabalgatistas entre  jinetes y amazonas.

En Batalla del Salado se ha conformado el desfile oficial con presencia del cortejo de damas y reinas juveniles e infantiles, de toda la Corporación municipal del Ayuntamiento de Tarifa, a excepción del alcalde, José Antonio Santos y del concejal Ricardo Silva, quienes cumplían con su tradición como cabalgatistas en los primeros puestos del cortejo, tas la representación de la hermandad

La representación militar estubo cubierta con el capitán de la Guardia Civil de Tarifa, Domingo Holgado, el representante de la Policía Municipal, Rafael Meléndez, y el Jefe del MACTAE, Ramón Silva. La Jueza de Paz, Mariluz Alba, también estaba en el desfile de hoy, junto a todos los representantes de cofradías y hermandades tarifeñas, junto al presidente del Consejo Local de HHyCC, David Robles.

La Banda Municipal de Música, con Pepe Muñoz como director a cargo de ella, hizo primera aparición en el lugar, tocando piezas emblemáticas relativas a la Patrona de Tarifa. El dato emotivo de este año también emana de esta agrupación porque todos sus integrantes llevaban el símbolo de la percusión, un broche, prendido cerca de sus corazones. Es el profundo recuerdo que mantienen vivo y el sentido homenaje que rinden a su recién desaparecido compañero Juan Antonio Ortiz.

Ayer, la imagen de La Campera, salía sobre las 16:30 horas en un repicar de campanas de su ermita, y entre un pasillo de caballos y cabalgatistas, muchos de ellos, ‘Caballeros Cabalgatistas’. Antes lo había hecho la imagen de San Isidro Labrador, Patrón de la campiña. Detrás de la imagen un reguero de gente, alrededor de unas 2000 personas que cada año cumplen con la tradición o la promesa de acompañar a la Virgen.

Todo el transcurrir durante los primeros 4,5 kilómetros se desarrolló sin incidencias y dentro de la normalidad. Cuando la comitiva se acercaba al cruce con la N-340, el desfile se adentró por La Colá, y lo que era polémica se convirtió en alabanza pues fueron muchos los devotos y participantes de la Cabalgata que reconocieron que el camino por este trazado se realizó de manera más cómoda que por la carretera nacional.

A la altura de La Vega, caballos, jinetes y comitivas cruzaron la carretera interfiriendo en mucha menor medida el paso de vehículos en ambas direcciones. A su hora prevista, pasadas las ocho de la tarde las imágenes y peregrinos llegaban a la cuesta del ‘Barrio Afuera’ y con acelerado paso, las imágenes alcanzaron la avenida, donde les aguardaban las autoridades municipales, y buena parte de la población con vivas a las imágenes la Solemne Salve y su himno.

A los sones de la Banda de Música, Agrupación Musical Manuel Reiné, la Patrona fue alcanzando el casco histórico para desembocar finalmente en las puertas de San Mateo, donde se le tributó la ‘Salutación’ y recibió el saludo de su cortejo cabalgatista formado este año por 236 caballos con sus respectivos jinetes o amazonas.

En el templo de San Mateo, en su altar mayor la imagen de la Patrona permanecerá hasta el próximo 24 de septiembre cuando regrese a su ermita. Antes se celebrarán innumerables cultos en su honor y se rematará su presencia con la renovación del voto de Patrona y con el Acto de Consagración, llamado popularmente ‘pasar por debajo del manto’.

Así concluyó la ‘Cabalgata’ la que abre las fiestas y la que precede a los numerosos actos litúrgicos que en honor a la Patrona, celebrará el templo mayor tarifeño durante el mes en el que muere el verano. Ahí quedó para regalo de devotos y para seguir escribiendo la propia esencia de una ciudad que con la llegada de La Campera, se hace pueblo.

Tras la llegada de la Virgen y San Isidro, muchos fueron hasta el Real para participar del ambiente festivo, aunque tras el inicio del sábado, la mayoría fueron a “subir a los niños a los cacharritos y dar una vueltecita porque mañana (por hoy) hay que trabajar).