El país occidental más poderoso del mundo tendrá como presidente a una persona condenada. Salvado de tener varias condenas más por haber sido elegido presidente por la mayoría de los que votaron en las elecciones estadounidenses, Trump y sus aliados multimillonarios llegarán al poder de manera real dentro de unos días, pero como aperitivo van ofreciendo determinadas píldoras para que la gente se vaya haciendo a la idea. Vemos tres propuestas básicas de su neoliberalismo a ultranza.
A expensas de lo que suceda con la Paz en Palestina, Trump y su equipo en primera instancia han mostrado un tono desafiante que viene a superar la incomprensible actitud estadounidense en la defensa de los derechos humanos y su papel en la masacre de Gaza. Trump no duda en amenazar con desatar un infierno. Ellos que no son capaces de acabar con el infierno del fuego en la Costa Oeste, donde el dinero también establece diferencias para recibir ayudas de los bomberos privados. Estas “trumpanadas” vendrían a señalar cómo, al neoliberalismo (como en sus orígenes el liberalismo), la condición humana de los más débiles es, por decirlo de alguna forma, secundaria. No importan proyectos de vida, ilusiones por cubrir… los débiles importan poco.
Otro elemento que parece va a dominar, antes incluso de ser investido presidente, es el sometimiento de todo el entorno digital. Se consolida la connivencia para la desinformación con los amos de las redes sociales y medios de comunicación. En este sentido, Trump debe pagar favores que le prestaron en la campaña y, por ello, sitúa a algunos de esos empresarios en altísimos cargos de responsabilidad y otros, viendo lo que pasa, rinden al poder sus empresas de redes sociales. Una especie de juramento de fidelidad para poder seguir sacando sus pingües beneficios, o incluso incrementarlos. El capital no entiende de ética.
Y la tercera pincelada es su deseo de ampliar su zona de poder. De esta manera, Groenlandia ha entrado en su georradar político dado el potencial de recurso que la mayor isla del mundo posee; Trump no descarta incluso el uso de la fuerza. En estas aspiraciones de expansión también entran Canadá y el canal de Panamá, por si fuera poco. Queda por ver qué papel tienen preparado para otros países en su intento de “hacer que Estados Unidos vuelva a ser grande”.
Lo paradójico de todo esto es la similitud de las conductas humanas que se pueden reflejar incluso en los pueblos más pequeños. Últimamente, en la política local, parece que estas ideas de neoliberalismo toman cuerpo disfrazadas.
Así, hemos conocido que, lamentablemente, se anuncia un ERE que afectará a 135 personas que trabajan en la naviera FRS y el gobierno local actúa como si nada en el apoyo a los trabajadores y trabajadoras. No importa cómo queden sus proyectos de vida, sus hipotecas contraídas, sus ilusiones a cubrir…los débiles importan poco.
También se habla de la creación de un partido de partidos localistas (por enésima vez en democracia, recordemos intentos como la PIE de Camuñas) que podría mostrar ese afán de expansión, de buscar más poder. Los promotores (entre los que se encuentra el nuevo partido localista tarifeño) tienen intención de presentarse incluso a las autonómicas y, según sus declaraciones, su ideario político no es de aquí ni de allá (como la canción), ni de izquierdas ni de derechas…y sólo les mueve el interés de querer hacer grandes a sus pueblos; vamos, un MAGA pueblerino.
Otra noticia con bastante paralelismo es cómo desde el poder local tarifeño se ha subvencionado de manera cuantiosa a un medio de comunicación privado por la puesta en marcha de un espacio televisivo en el cual, según ese mismo medio, “los alumnos se enfrentarán en un divertido concurso que consta de cuatro pruebas diferentes ideadas por …”. Resulta paradójico, si se revisa la web de este medio o su Facebook, como a partir de marzo de 2023 tomaron una postura clara de dar cobertura positiva al PP y especialmente a NAT y, por el contrario, dejaron casi sin presencia a los otros grupos. En el caso del PSOE aún fue peor, pues el grueso de las noticias era de críticas a su gestión (casi diarias) e incluso con artículos de opinión contra su cabeza de lista (por ejemplo, la columna de opinión “Espejito, espejito…”).
No me digan que en esos compartimentos políticos no hay una curiosa similitud.
Es lo que tiene aquello de lanzar bulos y poner en alerta a la ciudadanía sin motivos.
Falta transparencia y sobra oscuntarismo.
De traca….una opinión escrita en un medio de comunicación parcial y subjetivo…Años vendiendo y alzando al anterior gobierno. Meses de opiniones y noticias supuestamente objetivas… defendiendo(dicho por el profesional en cuestión) que si habia que cruzar líneas rojas..se cruzarían.. pero además les honra el hecho de atacar a sus colegas de profesión del otro medio local de “información” ja… viva la pepa