Mellaria califica de 'nefasta' la nueva escalera del Miramar

La asociación asegura que la nueva escalera de acceso “contraviene la legislación y expone a daños la torre medieval”. Aún no ha sido inaugurada y ya ha generado las críticas de muchos ciudadanos

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La escalera está encajonada entre la torre y un muro de hormigón que impide la visión del entorno del Estrecho, caleta y puerto/S.T.
Mellaria califica de 'nefasta' la nueva escalera del Miramar

 

Se veía venir. Las obras de la nueva escalera de acceso al Miramar, adosada a la torre del mismo nombre y que acorta el acceso desde el paseo marítimo hacia el casco histórico a través de la Plazuela del Viento, van a traer cola. Y lo va a hacer, porque las obras en cuestión -que se vienen ejecutando desde el pasado mes de enero, con una inversión de 200.000 euros, de los cuales 95.000 corresponden a la obra- no parece responder, desde luego, al objetivo y justificación de su proyecto técnico obra de los arquitectos Pedro Gurriarán Daza y Salvador García de “Yamur Arquitectura y Arqueología” que señalaba que la conexión viaria supondría “la revalorización del entorno monumental como atractivo destacado del turismo cultural en Tarifa”.

 

Y es precisamente su proyecto técnico que ha supuesto un desembolso de 115.000 euros, lo que supone el 75% del coste total del proyecto que ejecuta la empresa ‘Gestión e Innovación SL’, lo que ha desatado las críticas, de particulares y colectivos, que como en el caso de la Asociación Tarifeña para la Defensa del Patrimonio, Mellaria, ha calificado de “nefasto el proyecto” y critica además “la autorización de la Oficina Técnica Municipal y de los técnicos de Patrimonio, que no han contemplado la legislación que exige que los monumentos estén exentos de obstáculos para su visión, como es el caso de la ley 14/2007 de 26 de noviembre del Patrimonio Histórico de Andalucía en su artículo 19 referente a contaminación visual o en su artículo 28 sobre el entorno de los Bienes de Interés Cultural”.

 

Mellaria señala que “las escaleras construidas introduce un impacto visual inadmisible sobre el monumento de la torre del Miramar, de tal forma que ocultan a la vista general parte de su basamento y una de las columnas reutilizadas que se redescubrieron en la última intervención sobre la misma, contraviniendo la ley de patrimonio histórico que prohíbe expresamente actuaciones que oculten los monumentos o causen un impacto visual sobre ellos.

 

Mellaria declara que la prioridad de la obra debe ser la de destacar y mostrar en su conjunto la espléndida torre y su base y no de ocultarla tras un muro de hormigón que hace de baranda y que, además, ha requerido de un recrecido de tierras del terraplén en lugar de despejar el terreno inmediato a la torre para resaltar su monumentalidad.  

 

La asociación cultural “tampoco se explica que se haya proyectado la escalera en contacto con la histórica torre bajo el pretexto de apreciar los grabados de la piedra, cuando lo que es seguro es que al quedar accesibles se acelerará su deterioro y que acciones vandálicas la puedan dañar. Mellaria se asombra de la escasa sensibilidad mostrada por los ejecutores de esta obra, que viene a sumarse a los daños que insistentemente sufre el patrimonio cultural tarifeño.

 

No es la única crítica ejercida entorno a este proyecto, y son varios ciudadanos los que a través de las redes sociales han mostrado el rechazo a las nuevas escaleras. Tal es el caso de quien fuera Cronista Oficial de la Ciudad, Juan Antonio Patrón, quien al respecto ha señalado: “La escalera resta valor patrimonial a la torre, oculta la mitad de ella, que ha dejado de verse en su verdadera dimensión. Los muros para el pasamanos y el movimiento de tierras de más que ha elevado el talud en su trasdós no son de lo más acertado. Doctores tiene la Iglesia, pero en mi opinión y pese a que el proyecto, de arquitecto reconocido y amigo, cuenta con informe favorable de Cultura, no es para sacar pecho”.

 

Así, la polémica está servida en un proyecto que debería de ser aplaudido por todos y que sin embargo y a tenor del resultado final, parece no ha conseguido el resultado esperado. Desde el Consistorio no se ha comunicado la fecha prevista para la inauguración de las escaleras, ni tampoco se han pronunciado al respecto de las críticas y denuncia de Mellaria y de otros ciudadanos.

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