La operación facilita por un lado los intereses de la mercantil marbellí para urbanizar el frente litoral urbano pero también posibilita el traslado de la industrial a una nueva zona garantizando la continuidad industrial y el mantenimiento de los puestos de trabajo. La plataforma “Tarifa no se vende” lleva a cabo una recogida de firmas en change.org.
La mercantil Granparcela SL acaba de enviar nota de prensa en la que confirma la formalización de la compra de los terrenos que actualmente ocupa Industrial Conservera de Tarifa SLU, sobre la que en agosto del 2023 había firmado un contrato de preferencia de compra al igual que con Almadrabas de España SA para la adquisición de esos terrenos al objeto de propiciar un desarrollo urbanístico, no sólo en esos solares, sino en todo el frente litoral urbano, en lo que es una superficie de unos 150.000 metros cuadrados.
Y es que con esta operación mercantil la sociedad (constituida apenas hace dos años) se garantiza, se convierte en “propietario privado mayoritario” lo que tras la firma del convenio suscrito con el Consistorio, le otorga el derecho de actuar “como promotor y, en su caso, financiador, de la iniciativa, al carecer el Ayuntamiento de recursos técnicos y humanos tanto para la elaboración de los instrumentos de ordenación que deben tramitarse, como para la posterior renovación de la urbanización, promoviendo, igualmente, la asistencia del resto de propietarios, aunándose todos ellos, o los que opten por ello, en la aplicación del sistema de actuación por compensación”, según el texto.
Tras la publicación en el BOP de lo que hasta el pasado viernes era una “mera declaración de intenciones” y la concreción de la primera compra de terrenos, el Plan de Reforma Interior que transforme el frente litoral va cobrando sentido y lo recogido en el convenio suscrito entre la administración local gobernada por PP y Nuevos Aires Tarifa una posibilidad real. Es decir, que el Plan de Frente Litoral acarrearía el traslado de dos institutos, un colegio, equipamientos deportivos además de tener afectación a las viviendas de La Chanca o el cerro y castillo de Santa Catalina.
En el comunicado enviado a los medios, la empresa ha valorado la operación como “una muestra de nuestra firme voluntad de invertir en esta ciudad, y en este caso particular, en ayudar a una de sus empresas con mayor tradición social, identitaria y reconocimiento internacional, a asegurar su futuro y viabilidad en términos de productividad y creación de empleo. Es una excelente noticia para Tarifa y, sobre todo, para los trabajadores de Conservera de Tarifa”, según la visión de Granparcela recogida en un comunicado. Y es que la mercantil se ve como una herramienta de transformación y prosperidad para el municipio, más que como una amenaza, que es como la ven grupos ecologistas, partidos políticos progresistas o la plataforma ciudadana “Tarifa no se vende” que ha comenzado a través del portal change.org una recogida de firmas contra el proyecto urbanístico que en pocas horas ha conseguido la atención de más de 880 personas.
Si la formalización de la compra de los terrenos de la conservera es una consolidación de que el convenio para el Frente Litoral es “algo más que una mera intención”, también lo es para garantizar la viabilidad de la actividad conservera. Y es que esta compra facilitará la operación para trasladar la actividad a un nuevo emplazamiento, casi con toda seguridad a la zona de La Vega. “Y poner fin a los actuales problemas logísticos de carga y descarga y sanitarios que padece”, apunta en su comunicado Granparcela SL.
La nota de prensa Granparcela también aporta la visión de José Luis Muñiz, administrador de la Conservera de Tarifa. En tal sentido el gerente apunta: “Es una operación que nos permite avanzar en la dirección correcta. Es un secreto a voces que necesitamos trasladarnos a una nueva ubicación. No podemos seguir en el centro de la ciudad, con todos los problemas que eso acarrea de transporte, de gestión de residuos y de crecimiento. Confiamos en que los trámites administrativos culminen de igual manera, con éxito. Queremos mantener e incrementar nuestro número de empleados actual -en torno a un centenar- modernizarnos y cumplir anhelos como el de la creación de un museo de las conservas emblemáticas de Tarifa”, según Muñiz.
Un paso más en este controvertido asunto urbanístico que tiene una nueva cita de actualidad el próximo viernes, en sesión plenaria. Ya que si contrariamente como se ha apuntado desde algunos medios de comunicación el equipo de gobierno no lleva a pleno el polémico convenio, sí es cierto que estará presente y generará el debate de los munícipes, porque el grupo Socialista ha incluido una moción en la que solicita “la paralización y no firma del convenio con Granparcela SL y la urgente revisión del Plan General de Ordenación Municipal (antiguo PGOU ahora llamado PGOM).