La concejala Celia Rico ha justificado el no cerrar las instalaciones señalando que “la única manera de determinar el alcance de la fuga era mantener la piscina abierta y en funcionamiento con el fin de poder cuantificar el problema y el alcance de la fuga y que “se valoraron muchos parámetros y la necesidad del servicio a la ciudadanía “para finalmente mantener abiertas las instalaciones hasta la fecha”.
La Piscina Municipal cubierta ha permanecido durante un mes abierta y a pleno funcionamiento a pesar de conocerse que tenía una fuga de agua diaria sin cuantificar. Todo ello en plena sequía y cuando desde la Mancomunidad de Municipios (a través de la Mesa de la Sequía) se adoptasen extraordinarias medidas de restricciones en el uso y gasto del agua y se anunciase medidas contra quienes las incumpliese.
Esta fuga era conocida por este diario desde el pasado día 3 de marzo cuando diferentes usuarios pusieron estos hechos en nuestro conocimiento y confirmada por miembros del PSOE en la oposición quienes señalaban que se encontraban a la espera de un informe para concretar la “gravedad de la pérdida o fuga de agua” y de hecho, requeridos sobre este asunto han confirmado que emitirán nota de prensa en breve. Desde entonces este diario ha estado detrás del asunto, pero ha sido la propia concejala la que a través de una nota de prensa difundido por las redes sociales ha confirmado que las instalaciones tenían una fuga de agua que del mismo modo se comunica que está intentando solucionarse mediante el cambio de válvulas de la piscina.
En concreto la edil Celia Rico tras una visita, a las instalaciones, reconoce que el pasado mes de marzo se advirtió de un problema en la turbidez del agua, que, además, daba parámetros anormales. Fue ahí cuando se vio la necesidad de contar con una empresa especializada para valorar este síntoma, determinándose que la cloradora no funcionaba bien. Aprovechando el cierre para la estabilización se alertó también sobre una posible pérdida de agua y desde ese momento se ha estado trabajando en la reparación de las válvulas. El jueves por la mañana terminarán de montar las válvulas y avisaríamos, en caso necesario de cierre, del periodo necesario. Pero vamos a intentar que el perjuicio sea el menor posible”.
Ante la confirmación de la fuga, este diario ha interpelado a la edil preguntándole cómo y por qué en tiempo de sequía, mientras desde la Mancomunidad se daban parámetros y ordenamientos de restricciones en el uso del agua, se ha mantenido abierta la piscina y Celia Rico ha justificado el no cerrar las instalaciones señalando que “Se ha actuado desde el minuto 0. La única manera de determinar el alcance de la fuga era mantener la piscina abierta y en funcionamiento con el fin de poder cuantificar el problema y el alcance de la fuga”, y que “se valoraron muchos parámetros y la necesidad del servicio a la ciudadanía. El que se tenga una pérdida de agua sin cuantificar o no, no implica que no se pueden mantener abiertas”, asegura la edil quien también señala que la pérdida de agua “no implica un mayor consumo o gasto energético”.
La edil señala que “la cantidad de agua que se pierde no se puede cuantificar” y que “el mayor problema que ha tenido la piscina es que tenía los parámetros (de turbidez) distorsionados”.
La concejala ha confirmado que la empresa especializada que está procediendo al cambio de las válvulas ya había acometido una primera actuación con el cambio de la clonadora y que hasta que no se terminen de colocar las válvulas de la piscina no se va a poder determinar la cuantía de la pérdida de agua”.
Después de veinticinco años de funcionamiento, la empresa de mantenimiento 8según se apunta desde el Consistorio) ha visto necesario la reposición de piezas de esta infraestructura fruto del convenio y como medida compensatoria de la instalación de la Interconexión Eléctrica con Marruecos el denominado Cable de Tarifa. “Tenemos en cuenta que es una instalación de veinticinco años sin mantenimiento, con reparaciones puntuales y sobre la marcha, de ahí que se sucedan este tipo de problemas en su sistema”, ha explicado la concejala del área responsable, Celia Rico quien confía que las reparaciones no afecten al funcionamiento normal de la piscina. Con todo, esto es un aspecto que se verá en las próximas horas, cuando se anunciarán las conclusiones derivadas de los primeros análisis.